JESUCRISTO REY DEL UNIVERSO

Mensaje  a  Stefania  Caterina

Queridísimos hijos:

Primero de todo os bendigo con mi bendición de Rey. Vengo a deciros  que desde hoy comienza  precisamente para vosotros una verdadera cuenta regresiva. No os alarméis, esto no significa que todo deba suceder mañana. Lo que quiero deciros es que los tiempos son siempre cada vez más breves, porque la evangelización del bajo universo está por finalizar.  Terminará el próximo 6 de enero y esto significa mucho para vosotros. Significa que los hermanos fieles, una vez concluida la evangelización  y las últimas tareas que deben desarrollar todavía en el bajo universo – es preciso reforzar algunas humanidades y continuar siguiéndolas de cerca- se dirigirán a la Tierra.

Atención sin embargo: se dirigirán hacia aquellos de la Tierra que están preparados, purificados,  aquellos que en estos años han caminado, atendido y esperado. Serán enviados no solamente  a esta Fundación sino también a muchas otras personas que sin conocer en detalle estos programas, como vosotros, están preparados profundamente en su espíritu.

¿Por qué vendrán los hermanos? Porque comienza la verdadera evangelización  de la Tierra. Vosotros habéis llegado hasta este punto en la evangelización, pero solos no podéis ir más allá. La Tierra atraviesa condiciones tan graves  que los hombres de la Tierra no lo pueden hacer por sí solos; por eso vendrán los hermanos fieles a ponerse a vuestro lado en la evangelización de vuestro  planeta.

Como os dicho  no irán al acaso sino que irán a cuantos yo indicaré y que vea preparados. Os he dicho que este es el tiempo de la cosecha, que debe suceder antes de todo en cada uno de vosotros: Yo  pasaré a recoger los frutos  dentro de vosotros ¡No os hagáis  ilusiones! No os mandaré los Hermanos fieles solamente porque pertenecéis a la Fundación o porque decís que pertenecéis a  este pueblo. Ahora más que nunca espero de vosotros la coherencia con cuanto habéis dicho hasta aquí. Espero que os despojéis verdaderamente de vuestras ideas, de vuestras lógicas y presunciones que están todavía dentro de vosotros. No os quiero perfectos porque sé muy bien que no podéis serlo; pero os quiero sinceros, abiertos, preparados, de otro modo los hermanos  no vendrán a vosotros y se irán a otros.

Os llamo a este desprendimiento porque habéis declarado aceptar este programa y querer vivir en el ofrecimiento, en la pureza y en la comunión.  Por esto vendré a recoger los frutos de vuestra ofrenda, de vuestra pureza, de vuestra comunión. ¡Si no me dais estos frutos no podré enviaros a evangelizar a los demás, porque deberéis ser  evangelizados vosotros mismos! No os hagáis encontrar sin frutos, indecisos entre el  sí y el no, en una vida no íntegra. No hagáis que os encuentre sin frutos, divididos entre vosotros y descontentos los unos con los otros. Resolved vuestras controversias según cuanto se os ha enseñado, porque tenéis todos los medios para hacerlo; si permanecéis encerrados en vuestras ideas, razones y seguridad, no lo podréis hacer.

Os digo más,  que me sirve la plegaria que eleváis. Espero de este pueblo y de cada uno de vosotros una plegaria muy elevada, una gran plegaria. Por eso os invito a liberar  vuestra oración de todas vuestras intenciones humanas que no sirven para nada. Comenzad desde hoy a rezar según las intenciones de mi Madre y no  pongáis delante de mí vuestras intenciones.  Vuestras intenciones pueden estar totalmente equivocadas, disfrazadas por vuestro yo y  por vuestra humanidad, por aquello que vosotros consideráis justo. Ahora ya no es tiempo  de pedir aquello que vosotros consideráis justo.

¡Cancelad vuestras verdades porque ahora debe  permanecer una sola Verdad! Os he dicho que  YO SOY LA VERDAD.(1)  Debéis vivir el Evangelio, mi palabra. Sólo entonces podréis orar en forma  pura, noble, elevada. Esto es muy importante para vuestra preparación.

Por último os digo  que la manifestación  de los hermanos fieles a toda vuestra humanidad acontecerá al finalizar la evangelización de la Tierra.

Será una manifestación breve porque en aquel momento ya habré recogido todo aquello que debía recoger, a través de San Miguel  y de los ángeles. (2)

Los ángeles están pasando  ya a recoger primero la cizaña y después el grano.

La cizaña está casi ya recogida, el grano todavía no. Cuando la cosecha esté terminada los hermanos se manifestarán visiblemente a toda la humanidad de la Tierra, después de lo cual YO vendré.  No habrá mucho más tiempo entre su manifestación y mi venida: concederé  el tiempo mínimo indispensable  para la conversión de los últimos y nada más.

Por eso os he dicho que ha comenzado la cuenta regresiva y ya no se juega más. Sabed bien que cada palabra que decís puede  retorcerse en contra vuestra: os lo digo porque veo todavía entre vosotros cosas que no cuadran. Es tiempo ya de dejar todo aquello que es todavía muy humano en vosotros-.

Tiradlo todo fuera: vuestras ideas, vuestros programas, las convicciones  personales; tiradlo todo fuera  porque no os sirve para nada. Les asigno una gran tarea, la de perfeccionaros a vosotros mismos.  No podéis hacerlo solos, seré Yo quien lo haga en vosotros a través del Espíritu Santo, y mi Padre llevará a cumplimiento en vosotros su obra.(3) A vosotros os toca estar dispuestos, abiertos, y disponibles; de otro modo todo será inútil.

Os bendigo y os mando como mis apóstoles y misioneros, puros, fuertes, preparados, en el nombre del Padre, del Hijo y  del Espíritu Santo.

1-Jn.14-6

2-Mt.13.30

3-Ef4.1al 6

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s